Europeas en El Campello; datos y opiniones

El pasado, está marcado, por un lado, por la pluralidad surgida de las urnas en 2011 y por la consecución de una mayoría plenaria por parte de la derecha en 2014. Igualmente, el pasado, en lo que a datos electorales se refiere, está definido por la contrastación de los resultados obtenidos por los partidos con representación municipal en las europeas de 2009 y los obtenidos en mayo pasado.

No voy a valorar los datos de las municipales de 2011 pues no es posible contrastarlos, ni con las generales ni con las europeas. Aunque sí es necesario, al margen de los datos hechos públicos en el periódico La Illeta y en la Web municipal (en los que se obvian datos complementarios que dotan de “otro” sentido al que pretenden los ofrecidos desde el Ayuntamiento). En las elecciones europeas de 2009, el partido popular obtuvo 4450 votos sobre un censo de 17.609 votantes ( con una abstención del 48,57, o lo que es lo mismo: 8553 ciudadanos consideraron no ir a ejercer su derecho por diferentes causas, principalmente, por considerar que Europa es un ente, además de ajeno, lejano). El partido popular en El Campello obtuvo más de ocho puntos más que el pp nacional (52% a nivel local frente al 42% a nivel nacional). El pasado mes de mayo, el pp obtuvo en El Campello 2392 votos frente a un censo de 18960 electores, con una abstención del 55,15%, lo que demuestra la escasa capacidad de los partidos políticos para incentivar la asistencia a las urnas, pese a la relevancia de la consulta). En definitiva, el pp. perdió en 2014, 2058 votantes, lo que, pese a haber obtenido mayor número de votos le sitúa con una pérdida de más del 25% de los votos, algo que seguramente está preocupando a más de uno en el gobierno municipal pese a la ausencia de cualquier tipo de análisis, si exceptuamos los términos de la noticia aparecida en los medios de comunicación locales (incluida la web municipal, a la que se le debería dar un carácter, por así decirlo, menos manipulador): “el pp ha ganado las elecciones”, desde la unilateralidad cuantitativa y, evidentemente, interesada.

En cuanto al PSOE, en 2009 obtuvo 3021 votos del total del censo, con un 35,4%. En 2014, obtuvo 1595 votos, lo que supone, el 19,4% del total de votos válidos. La perdida, en número de votos ha sido de 1426 votos, o un 16,3%. Porcentualmente, la perdida de votos ha sido, menor, pero quizá más significativa a la vista de la progresiva disminución del apoyo electoral que éste partido ha ido obteniendo desde hace convocatorias. Este partido no ha hecho ninguna valoración a nivel local, cuando en el ámbito federal si se ha hecho una valoración claramente autocrítica, escenificada con la convocatoria de un congreso extraordinario en el mes de julio. En mi opinión, le hecho de que en el Campello, tanto la campaña electoral de las europeas, como cualquier tipo de valoración posterior a ellas no haya tenido respuesta alguna desde la organización local es un hecho lo suficientemente preocupante como para que en el partido socialista se abriese un serio y profundo proceso de reflexión, más allá de los intereses particulares o los egos personales. De lo contrario, la “sangría” de apoyo que éste partido sufre le afectará, más allá de las variables que puedan influir en las próximas elecciones municipales.

Como he venido manteniendo, no es posible proyección alguna, pues las variables que intervienen en un proceso electoral local tienen una relación tangencial con otras consultas. No obstante, la irrupción de una organización como Podemos, siempre que se concrete en una alternativa electoral en 2015, puede venir a modificar el mapa electoral así como una dinámica municipal basada en la opacidad y el personalismo como paradigma. Otra organización que tendría que reflexionar es Esquerra Unida, que, habiendo obtenido un resultado mucho mayor que en 2009, el total de votos es casi similar al de las municipales de 2011, lo que indica que existe un sector de votantes de izquierdas que, pudiendo haber votado a EUPV, lo ha hecho a la candidatura de Podemos (considero que esto también ha sucedido con una parte del voto del PSOE).

Una de las conclusiones que podrían sacarse del cruce de datos es que, con toda seguridad las próximas elecciones estarán marcadas por una pluralidad similar a la surgida de las urnas en 2011, con la diferencia posible de una candidatura como la de Podemos que supone una clara y contundente ruptura con la dinámica tradicional de los partidos tradicionales, tanto el modo, como en las formas, tanto en el contenido como en el continente.

¿Un toque de atención?. La abstención, más la disgregación electoral, más la irrupción de podemos considero que es algo más que un toque de atención: es un aviso a navegantes, y el que no lo entienda, seguramente está condicionado por las emociones, que no por el análisis racional.