El Consell suspende la aprobación del Plan General y exige suprimir la construcción de 3.500 viviendas
El Campello, ese pintoresco pueblo marinero de antaño, ha dejado paso al ladrillo y la especulación como hecho diferenciador y significativo de la política local. El que los "hermanos" autonómicos de "nuestra" derecha, hayan rechazado el salto al vacio, es sintomático del rumbo errático que han desarrollado y están empecinados en mantener l@s chic@s de la derecha campellera. El expansionismo "setentista" no cuela y no tragan con el ni los que apostaron por Marina d'Or, que ya es decir.
Es cada día más evidente que, lejos de "lamentar" que los planes no se aprueben, digamos las verdades del barquero. Con sensatez y responsabilidad, pero con compromiso, que en definitiva es lo que falta en nuestro pueblo.
El Partido, y la izquierda en general, deben plantear a la sociedad Campellera cual es la alternativa al "no gobierno" del Sr. Alcalde/Diputado/Concejal de Hacienda..... Y debemos hacerlo con contundencia, pues de lo contrario, la manida frase de "todos iguales" se convertirá en una cruda y deprimente realidad.
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