¿SYRIZA?

Antes fue "el olivo", ahora es Syriza. La izquierda sigue buscándose en un bucle de difícil solución. 

Por un lado, IU persigue convertirse en el referente electoral de una izquierda electoral desencantada e incluso avergonzada. La pretensión, legítima por otro lado, choca con los aires que se mueven en la sociedad. ¿Qué aires?. Pues aíres de democracia radical, directa, asamblearia y absolutamente horizontal.

El PsoE sigue pensándose el ombligo de la izquierda a pesar de serlo únicamente a nivel testimonial, como organización política, aunque mucha de su militancia sí lo es. El resto de la izquierda, viven a caballo entre los movimientos sociales ( sin vanguardizar, como uno más) y la necesidad de fortalecer su propia organización.

En mi opinión, la solución no es un Syriza, ni aglutinar fuerzas en una izquierda plural institucionalizada. Evidentemente, volver a apoyar a un PsoE empedernidamente endogámico tampoco es una opción. Entonces, ¿cual, qué...?. Como decía, en mi opinión, la solución pasa por la concreción, en el seno de los movimientos sociales, de una alternativa electoral que vuelque definitivamente el sistema hacia la ciudadanía, hacia la clase trabajadora que, de forma colectiva, democrática y horizontal ( aplicando las listas abiertas, la posibilidad de ejercer el voto en primarias a cualquier ciudadano o ciudadana que así lo desee, la revocabilidad de los cargos y su rotación obligatoria ( contra la profesionalización), el funcionamiento en asamblea abierta, etc.

Seguiremos hablando.

Salud y socialismo.