¿Sorpresa?. No, pero si una vergüenza que parecen no compartir otros que, ven con normalidad cualquier tropelía que la derecha comete sin poner ni un punto ni una coma. Eso si es sorprendente.
El colectivo funcionarial se ha convertido, en vez de en la punta de lanza de la solidaridad en un reducto de egoístas insolidarios. El que el Ayuntamiento haya destinado 1.000 euros para la barra libre de la comida de Santa Rita, no es un escándalo. Lo que es escandaloso es que nadie en el amplio colectivo de funcionari@s haya levantado la voz, máxime cuando al personal de servicios se le ha reducido el presupuesto para vestuario ( menos calzado, menos ropa....menos seguridad ). Nadie ha dicho ni pío.
La función pública, hoy día, tendría que estar a la vanguardia de la lucha por el empleo estable y los derechos sociales. Esta afirmación, choca, lo se, con otra realidad paralela: la de los altos cargos políticos y sus amigos. Mientras éstos no amolden sus retribuciones a criterios éticos y no empresariales, poco se les podrá pedir al colectivo de funcionarios/as. Pero, los/as funcionarios/as tendrían que mantener una reivindicación paralela a las económicas, y es que: parte del dinero de los políticos, para crear empleo. Los funcionarios/as deberían mantener otra reivindicación: no más fondos para premiar, no más servicios extraordinarios, contratación de más personal ya.
¿Pedir un imposible?. Tal y como están las cosas SI. Pero es necesario decir las cosas como son sin miedo a que ese grupo de insolidarios ( que no son todos, pues a la comida con barra libre asistió menos de un tercio del total de funcionarios/as), que coincide casi siempre con los que más cobran y con los que más premios vía productividad reciben, se enfaden. Dos problemas tienen: hacer su trabajo o hacer su trabajo.
Que las estructuras organizativas de los servicios municipales están podridas casi en su totalidad, es una evidencia que habrá de abordar desde la premisa de que los/as empleados/as municipales no se deben al gobierno de turno, sino a los/as ciudadanos/as de El Campello. Ese sería un buen punto de partida para la RPT que se está elaborando, y no las reclamaciones, peticiones y cuestiones similares que se manejan como argumentos.
SALUDOS SOCIALISTAS.
El colectivo funcionarial se ha convertido, en vez de en la punta de lanza de la solidaridad en un reducto de egoístas insolidarios. El que el Ayuntamiento haya destinado 1.000 euros para la barra libre de la comida de Santa Rita, no es un escándalo. Lo que es escandaloso es que nadie en el amplio colectivo de funcionari@s haya levantado la voz, máxime cuando al personal de servicios se le ha reducido el presupuesto para vestuario ( menos calzado, menos ropa....menos seguridad ). Nadie ha dicho ni pío.
La función pública, hoy día, tendría que estar a la vanguardia de la lucha por el empleo estable y los derechos sociales. Esta afirmación, choca, lo se, con otra realidad paralela: la de los altos cargos políticos y sus amigos. Mientras éstos no amolden sus retribuciones a criterios éticos y no empresariales, poco se les podrá pedir al colectivo de funcionarios/as. Pero, los/as funcionarios/as tendrían que mantener una reivindicación paralela a las económicas, y es que: parte del dinero de los políticos, para crear empleo. Los funcionarios/as deberían mantener otra reivindicación: no más fondos para premiar, no más servicios extraordinarios, contratación de más personal ya.
¿Pedir un imposible?. Tal y como están las cosas SI. Pero es necesario decir las cosas como son sin miedo a que ese grupo de insolidarios ( que no son todos, pues a la comida con barra libre asistió menos de un tercio del total de funcionarios/as), que coincide casi siempre con los que más cobran y con los que más premios vía productividad reciben, se enfaden. Dos problemas tienen: hacer su trabajo o hacer su trabajo.
Que las estructuras organizativas de los servicios municipales están podridas casi en su totalidad, es una evidencia que habrá de abordar desde la premisa de que los/as empleados/as municipales no se deben al gobierno de turno, sino a los/as ciudadanos/as de El Campello. Ese sería un buen punto de partida para la RPT que se está elaborando, y no las reclamaciones, peticiones y cuestiones similares que se manejan como argumentos.
SALUDOS SOCIALISTAS.
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