Una pregunta me corroe la mente: ¿a que dedicarán el tiempo los y las Concejales de la derecha en el tiempo que dedican al Ayuntamiento?. Y me lo pregunto, porque a la vista de lo poco o nada que está pasando en El Campello es como para preocuparse.
El Presupuesto municipal, según manifestaciones del Sr. Concejal de Hacienda, será presentado en sociedad y puesto de largo a finales del presente mes. Con toda seguridad el endeble documento tendrá una presentación en sociedad tal y como nos tienen acostumbrados los chicos de la derecha gobernante: bajo palio, con luz ( la que ellos quieran) y con los taquigrafos contaditos para que los números no se desbaraten.
A titulo personal estoy dando un repaso al presupuesto 2008, como base para hacerme unas cábalas personales sobre cómo serán los números del 2009. Evidentemente ni yo, ni casi nadie sabe que contendrá ese regalo popular, pero a la vista de las incognitas que plantea y lo duro del trabajo de su confección, sorpresas dará, seguro.
Vamos a poder valorar el nivel de compromiso del gobierno municipal de la derecha con la crisis. Cómo plantea los gastos, sobre que horizonte privatizador se vislumbra el futuro de los servicios ( dinero para personal no hay, pero para poner en manos privadas si...paradojas te da la vida, habiendo como hay soluciones mixtas), qué tipo de política social plantea, que ayudas complementarias propone a los pequeños y medianos empresarios, a los autónomos que trabajan abnegadamente en El Campello, a los jóvenes...
El debate debería ser intenso y, aunque corto hasta su aprobación (los chicos de la derecha acortarán el debate todo lo posible para intentar correr un tupido velo sobre el presupuesto, ¿nos apostamos algo?), tendría que intentar aglutinar, tanto a la izquierda institucional como a los/as ciudadanos/as que, artos de que se les ignore, deseen participar del mismo. La responsabilidad en esto recae en los grupos políticos de la izquierda municipal que, desde la pluralidad, y haciendo un ejercicio de responsabilidad ideológica, unifiquen de una vez, aunque sea una propuesta presupuestaria ( camino abierto para un acuerdo de mayor calado).
Propuestas para abordar la crisis y crear empleo directo, las hay. Propuestas para invertir en políticas sociales a medio y largo plazo, también. Propuestas dirigidas a construir una alternativa económica que supere la temporalidad del turismo y la coyunturalidad del ladrillo, las hay. Todo es que se proponga un debate utilizando los recursos que tenemos a nuestra disposición: partidos políticos, colectivos sociales, grupos animados de vecinos/as, jóvenes, mayores inquietos, sindicatos comprometidos... Ahora, pongámonos a la tarea porque tiempo, todavía tenemos.
El Presupuesto municipal, según manifestaciones del Sr. Concejal de Hacienda, será presentado en sociedad y puesto de largo a finales del presente mes. Con toda seguridad el endeble documento tendrá una presentación en sociedad tal y como nos tienen acostumbrados los chicos de la derecha gobernante: bajo palio, con luz ( la que ellos quieran) y con los taquigrafos contaditos para que los números no se desbaraten.
A titulo personal estoy dando un repaso al presupuesto 2008, como base para hacerme unas cábalas personales sobre cómo serán los números del 2009. Evidentemente ni yo, ni casi nadie sabe que contendrá ese regalo popular, pero a la vista de las incognitas que plantea y lo duro del trabajo de su confección, sorpresas dará, seguro.
Vamos a poder valorar el nivel de compromiso del gobierno municipal de la derecha con la crisis. Cómo plantea los gastos, sobre que horizonte privatizador se vislumbra el futuro de los servicios ( dinero para personal no hay, pero para poner en manos privadas si...paradojas te da la vida, habiendo como hay soluciones mixtas), qué tipo de política social plantea, que ayudas complementarias propone a los pequeños y medianos empresarios, a los autónomos que trabajan abnegadamente en El Campello, a los jóvenes...
El debate debería ser intenso y, aunque corto hasta su aprobación (los chicos de la derecha acortarán el debate todo lo posible para intentar correr un tupido velo sobre el presupuesto, ¿nos apostamos algo?), tendría que intentar aglutinar, tanto a la izquierda institucional como a los/as ciudadanos/as que, artos de que se les ignore, deseen participar del mismo. La responsabilidad en esto recae en los grupos políticos de la izquierda municipal que, desde la pluralidad, y haciendo un ejercicio de responsabilidad ideológica, unifiquen de una vez, aunque sea una propuesta presupuestaria ( camino abierto para un acuerdo de mayor calado).
Propuestas para abordar la crisis y crear empleo directo, las hay. Propuestas para invertir en políticas sociales a medio y largo plazo, también. Propuestas dirigidas a construir una alternativa económica que supere la temporalidad del turismo y la coyunturalidad del ladrillo, las hay. Todo es que se proponga un debate utilizando los recursos que tenemos a nuestra disposición: partidos políticos, colectivos sociales, grupos animados de vecinos/as, jóvenes, mayores inquietos, sindicatos comprometidos... Ahora, pongámonos a la tarea porque tiempo, todavía tenemos.
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