Las palabras de Jorge Alarte deben crear profunda preocupación en la militancia (que se positivamente que queda) del PSPV-PSOE. Su actitud ante la más que evidente crisis ( excepto para el) que atraviesa el PSPV (principal organización de la izquierda valenciana) es de un cinismo absoluto. El sabe positivamente que la reconstrucción del PSPV-PSOE como una organización progresista, como un partido socialdemócrata será sin el y sin los que el ha situado en el escenario directivo. Sin el y sin los vestigios de ese lermismo añejo e interesado ( al igual que el sector de Alarte) únicamente en mantener a cualquier precio las prebendas y los privilegios del poder, por muy miserable y raquítico que éste sea. Y a sabiendas de esto, cual garrapata se agarra al poder orgánico para, sin vergüenza ninguna, declarar que, pese a la debacle, piensa volver a presentarse. Seguramente ya estará pactando con los lermistas las cuotas de poder que se repartirán, pensando que nadie podrá hacer frente al parapeto creado por él mismo y que tanto calor orgánico le está dando. Seguramente, la militancia ( que queda, seguro) del PSPV está asqueada hasta tal punto que lo único en que piensa es en quemar el carnet y abandonar. Si así es, siempre queda un espacio a la izquierda, y ellos lo saben. No obstante, considero que la reconstrucción de un nuevo proyecto, parte de una clara refundación ideológica y programática, pero también de la creación de un contrapeso político que "obligue" al PSPV y al PSOE a girar a la izquierda: esa es la refundación de la socialdemocracia y no otro.
Creo que en el PSPV hay personas decentes y de una enorme dignidad ideológica que, con toda seguridad, van a dar batalla al conformismo derrotista con el que Alarte y los suyos pretenden llenar a la organización. Seguro que será una batalla de ideas, de propuestas, exenta de contenido personal o personalista, pero creo humildemente que ese proyecto no debe copiar las viejas estructuras "familiares", sino partir de una recuperación de la socialdemocracia como elemento vertebrador de una izquierda plural, sumando y trabajando por y para la unidad de la izquierda diversa frente a la derecha única, grande y libre ( para delinquir con patente de corso...). Creo y espero que, de una vez por todas, la izquierda en el PSPV-PSOE deje el institucionalismo y la falsa lealtad ( ¿con quién y con qué si no es con las ideas?) y plante cara, por el bien del PSPV y de la izquierda valenciana ( que necesita un PSPV fuerte orgánica e ideologicamente).
Y en el ámbito local, pues nada se ha oído de dimisiones y refundación en las localidades donde la derecha ha pasado por encima del PSPV-PSOE: nada se oye en Sant Joan, nada en Mutxamel, nada en Alacant y nada en El Campello ( donde la derecha no ha pasado por encima, sino que el PSPV sigue remando contra corriente cosechando derrota tras derrota...sin ofrecer un ápice de compromiso ni de dignidad política). Creo que las bases socialistas deberían plantearse un proceso de refundación local más allá de lo que pueda o no plantear la dirección , o en su caso, el paso hacia Esquerra Unida como única opción de izquierdas, con claras señas de identidad y claros compromisos ideológicos con la clase trabajadora. Quizá de esta manera, no es que se vean obligados a una reflexión, sino que tendrán que hacer una reconstrucción física y militante de la organización por el grave riesgo de desaparición ( lo dudo, pues en la miseria de la derrota, todavía se reparten prebendas y carguitos).
Salud y Socialismo
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