“ETA no ha impuesto” el diseño de Bildu “a través de una disuelta Batasuna al conjunto de la izquierda abertzale sino muy al contrario, es esta la que a través de un proceso de maduración política y de discusión interna ha llegado a dar un giro copernicano desde su tradicional actitud subordinada a ETA hacia un rechazo absoluto y sin ambages de la violencia como método de invervención política, apostando exclusivamente por los métodos democráticos”.
La extrema derecha ha ganado la batalla en la sala 61 del Supremo. Queda de manifiesto, una vez más, que cuando se trata de interpretar interesadamente la Ley, los tribunales, ni son independientes, ni son autónomos del poder legislativo. Un paso atras para lograr la pacificación definitiva de Euzkadi, pero esperemos que no suponga la ruptura definitiva del proceso emprendido por la izquierda abertzale.
El PSOE y el PP han "vendido" publicamente que impedir que BILDU se presentase a las elecciones era un deber constitucional y que habría que respetar lo dispuesto por los tribunales. La extrema derecha lanzará las campañas al vuelo porque "han sido ellos y solo ellos los que han logrado, no solo doblegar a los terroristas, sino arrodillar al Gobierno en su alianza con ellos. Y todo ello, con el gesto resignado del Gobierno que asiste indiferente a la enésima bofetada que la extrema derecha le propina. Concluyéndo: el PSOE y su Gobierno han cedido ante la extrema derecha, permitiéndo que ésta imponga criterios con los que no estamos de acuerdo muchos y muchas en el Estado Español y mucho menos en Euzkadi.
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