Los nacimientos de último momento llegaron con el cheque bebe, los rezagados, lo perdieron. No importa la situación de las familias, simplemente han sido las primeras victimas inocentes de los recortes sociales. Decir que la política social es bandera de nustro trabajo político basándose únicamente en los datos y cifras pasados es poco responsable. Los recortes son lo que son y afectan a quien afectan.
Tan injusto fue la aprobación de la deducción de 400 y el cheque bebe con una aplicación de forma generalizada ( la Botín se benefició, por ejemplo) , como su supresión de forma generalizada. La sensibilidad social debería habernos hecho plantear prioridades por ingresos, continuando con los beneficios a los más necesitad@s, como un apoyo del estado frente a la crisis de la que ell@s son victimas. Pero no: la solución es el recorte sin más.
Los niñ@s que han nacido a las doce menos un minuto o a las doce y un minuto han tenido que disputarse en la línea de llegada un beneficio económico con el único criterio del tiempo y no de la necesidad.
Salud y Socialismo.
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