La dimisión de la Secretaria General, apoyada por la de todos los miembros de la Comisión Ejecutiva Municipal ( no cabía, pero era un gesto necesario) pone fin a dos años de una tensa y complicada situación.
Despues de la elección de la CEM en el año 2008, se produce por parte de la Secretaria General un ofrecimiento a las diferentes sensibilidades ( entre ellas a Izquierda Socialista) para integrarse en la Ejecutiva. Fruto de este ofrecimiento, me integro en la Comisión Ejecutiva a pesar del voto contrario de varios miembros de la misma ( ahora en la candidatura del compañero Pepe Varó). A partir de ese momento la crispación va creciendo hasta producirse tres dimisiones ( se habían producido otras dos por motivos personales) y así, obligar a la Secretaria General a volver a ampliarla.
Desde entonces, un sector de la Agrupación ha insistido en la "alegalidad" de la Ejecutiva,teniendo diferentes oportunidades para recurrir a los órganos competentes solicitando su revocación y el nombramiento de una Gestora. No se hizo. Pero si se fue recopilando toda la información que consideraban "desleal" para instar, sin dar la cara, a la apertura de un expediente a el militante que suscribe éste blog. Teniendo los mecanismos necesarios, pensaron que el trabajo debía hacerse de forma silenciosa para no levantar sospechas de que lo que realmente se estaba fraguando era una maniobra que nos ha llevado hasta donde nos encontramos.
Mucho podríamos decir ( yo también podría decir mucho), pero no creo que sea el momento, pues lo que pudiéramos decir ahora no nos beneficiaría a ninguno y mucho menos a la candidatura elegida por el Comité Provincial. Así que algunos hemos optado por considerar esta situación como un paréntesis, poniéndonos a trabajar ya para reconstruir lo que en apariencia se ha tirado abajo. Desde mi humilde posición y desde Izquierda Socialista vamos a seguir intentando aportar nuestra opinión, nuestras alternativas y nuestras propuestas a una organización que esperamos que ahora sí sea reconocida por todas las partes; nosotr@s, evidentemente la reconocemos y reconocemos su legalidad.
Los que nos vamos, lo hacemos con la conciencia política muy tranquila y la personal más. Hemos intentado remar contra corriente sin querer dañar al partido aunque algunos, considerándose "el partido" se hayan sentido atacados. Lo cierto es que el partido, como organización política, ha sido ninguneado desde practicamente el inicio de la legislatura, por lo que la situación actual quizá sea la única posible para situar , o al menos intentarlo, todas las piezas en su sitio.
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